Issue link: https://elpueblocatolico.uberflip.com/i/1515519
E L M AT R I M O N I O Y S U S R E TO S El matrimonio no promete la felicidad tal como la define el mundo. El matrimonio puede incluir sufrimiento y grandes dificultades. El matrimonio no nos hace inmunes a las dificul- tades de la vida, pero sí nos proporciona una pareja que nos acompañará y ayudará a sobre- llevar las cargas de la vida. Así, ambos cónyu- ges deben practicar diariamente la entrega de sí al otro. Si me caso buscando mi propia felici- dad, probablemente me sentiré frustrado. Pero si me caso buscando la felicidad de mi cónyuge, dispuesto a dar mi vida, mis intereses y mis deseos al servicio de mi cónyuge, encontraré lo que mi corazón desea. En este sentido, Cristo es el ejemplo perfecto. Jesús derramó su vida por su esposa, la Iglesia, hasta el punto de morir en una cruz. ¿Soy capaz y estoy dispuesto a dar mi vida desinteresadamente por mi cónyuge, tal como lo demostró Jesús? CR I S TO E N E L M AT R I M O N I O La disciplina de la Iglesia establece que los católicos deben casarse con católicos. Un com- promiso religioso común de ambos cónyuges es un camino seguro para encontrar la gracia necesaria para perseverar en el compromiso matrimonial. Al mantener a Cristo como base de la vida matrimonial, los cónyuges están preparados para soportar cualquier cosa que la vida les depare. Incluso si tu cónyuge no es católico, es importante compartir una fe común en Cristo, razón por la cual a los cató- licos se les puede permitir casarse con un no católico bautizado. Jesús puede ser el funda- mento del matrimonio, incluso si ambas partes no son católicas. Se vuelve más difícil, pero no imposible, fomentar un matrimonio de por vida entre un creyente y un no creyente. Con una dispensa, a un católico se le puede permitir casarse con una persona no bautizada. Si un católico se casa con una persona no bautizada, es importante que el cónyuge bautizado man- tenga a Cristo en el centro de la relación. A través de la oración y del buen ejemplo, el cón- yuge bautizado puede llevar al otro a experi- mentar el amor de Cristo y quizás servir como impulsor de su conversión. 14 FEBRERO-MARZO 2024 | EL PUEBLO CATÓLICO El matrimonio no nos hace inmunes a las dificultades de la vida, pero sí nos proporciona una pareja que nos acompañará y ayudará a sobrellevar las cargas de la vida".

