¿Qué ha traído Jesús realmente, si no
ha traído la paz al mundo, el bienestar
para todos, un mundo mejor? ¿Qué ha
traído? La respuesta es sencilla: a Dios.
Él ha traído a Dios, y ahora conocemos
su rostro, ahora podemos invocarlo.
Ahora conocemos el camino que
los seres humanos tenemos que
seguir en este mundo. Jesús ha
traído a Dios y con Dios la verdad
sobre nuestro origen y destino:
la fe, la esperanza, el amor.
Sí, en efecto, el poder de Dios actúa
silenciosamente en este mundo, pero
es un poder verdadero y duradero.
Una y otra vez, la causa de Dios parece
agonizar. Pero la gloria de Cristo, la
gloria humilde y abnegada de su
amor, no ha pasado ni pasará jamás".
PAPA B E N E D I C TO X VI
(17 de abril de 1927 — 31 de diciembre de 2022)